APUNTES MUNDIALISTAS. RUSIA 2018.
Por: Ricardo F. Jasso Vivero.
DÍA 11. 23 de junio.
- LA ANHELADA CONSISTENCIA.
La Selección Nacional se impuso a Corea con tres atributos fundamentales. Organización colectiva, pulcritud en la defensa y puntería. Los grandes equipos se caracterizan por su consistencia en la alta competencia. México mantuvo la regularidad en un encuentro menos vistoso por las características del rival. El entrenador Juan Carlos Osorio repitió el mismo dibujo táctico empleado frente a los alemanes y sólo realizó un ajuste en la alineación. Edson Álvarez se situó en el lateral derecho, Carlos Salcedo se recorrió como central en lugar de Hugo Ayala. El TRI conformó un 4-3-3 con dos volantes de marca en medio campo y un creativo detrás del delantero centro. El laboratorio de Osorio es efectivo.
- LA INVENTIVA DE CARLOS VELA.
La estrategia de Corea del Sur fue esperar en bloque una pelota dividida o un descuido del oponente para lanzar a velocidad a sus relámpagos por los costados. Por ende, México utilizó el pase lateral con el objetivo de atraer y abrir espacios. La salida la construyeron sistemáticamente Héctor Moreno y Salcedo. Los coreanos fueron belicosos con reiteración de faltas para cortar las acciones y cometieron un total de 24. Para destacar el sacrificio de Miguel Layún y de Hirving Lozano en la doble función de atacar y defender. Carlos Vela marcó diferencia con su inventiva para enlazar al frente, lectura de juego y elección de la mejor opción. Para defender los saques de esquina, Osorio ha recurrido a ubicar a 3 hombres en medio campo para forzar al enemigo a permanecer con 4 en el fondo. Así se gestó el primer tanto. Rebote que Vela recuperó, cambió de juego a Layún quien condujo y trazó a segundo poste. En segunda jugada Javier Hernández conectó con Guardado y en el centro al área apareció la mano. Soberbia ejecución de Carlos Vela desde el manchón penal.
- SIN COMPLEJOS.
Sin complejos México asumió su rol protagónico en Rostov. La movilidad de México fue un argumento a favor. Andrés Guardado se desprendió de la zona de seguridad para incorporarse al frente y Héctor Herrera fijo en media cancha protegió su espalda. La presión alta brindó fruto cuando Herrera barrió para iniciar una rápida transición con superioridad numérica de 3 hombres contra 2 zagueros. Lozano asistió a Chícharo quien regateó al defensor y definió de pierna derecha. Rafael Márquez ingresó de cambio para enfriar el partido. Rafa regaló un balón en la salida pero entre Ochoa y él mismo evitaron la anotación. Uno de los pocos aspectos reprochables fue la anotación en contra en los minutos finales. Descuidaron a Son quien colocó al ángulo. El TRI un equipo valiente, inteligente y solidario.
- FINAL DE PELÍCULA.
La Mannschaft estaba contra las cuerdas a punto de ser noqueado por Suecia pero apeló al espíritu combativo y sobrevivió a la tormenta. Recibieron un gol en contra en una entrega de Toni Kroos que aprovechó Toivonen para doblegar a Neuer con un sombrerito. Previamente, el árbitro no señaló una falta de Jérome Boateng a Marcus Berg dentro del área quien se enfilaba a ajusticiar el arco teutón. Alemania controló el balón pero su adversario fue titánico al defender. Joachim Löw mandó al campo al delantero Mario Gomez por lo que Timo Werner se colocó por el flanco izquierdo. Marco Reus empató al minuto 48’ en un centro de Werner que Gomez no logró impactar y Reus entró como catapulta para empujar. El escenario se enredó más con la expulsión de Boateng a 10 minutos del final. El revulsivo Julian Brandt estrelló un balón en el poste. En un final de película, Kroos cobró una falta en la última acción de la contienda. Un tiro imposible sin ángulo. Una parábola magistral.
- SIN DESPEINARSE.
Sin despeinarse, Bélgica paseó con los tunecinos en el sector G. Exhibieron contundencia en un triunfo de 5 a 2. Comandado desde el banquillo por el español Roberto Martínez conjuga ingenio y explosividad. Las Águilas del Cártago nunca lograron competir sobre el césped del estadio Spartak en Moscú. El vértigo de los Diablos Rojos culminó en goleada. El tanque Lukaku y el capitán Eden Hazard convirtieron en 2 ocasiones. No obstante, el volante Wahbi Khazri desnudó fisuras en la retaguardia integrada por Vertonghen, Alderweireld y Boyata. Por cierto, el auxiliar técnico de Bélgica es el exfutbolista francés Thierry Henry.
