En uno de esos video-resúmenes que se hacen de un equipo campeón, los comentaristas decían del CASLA (San Lorenzo de Almagro) campeón de Pizzi: “fue el equipo más regular del torneo”. El camino del Cuervo en aquella ocasión no fue brillante, pero si firme. En un torneo donde se gana por puntos en seis meses y donde las estrellas se van con dieciocho años, no hace falta deslumbrar, sino cumplir.
El Club León derrotó a Guadalajara por 1-0 y dejó sensación de cosas sin hacer, de esfuerzos controlados y ganas de irse a casa temprano. Pero como decíamos, venció, y con ello se consolida como líder de la competencia, tiene un paso firma y acumula punto tras punto. Ya es el equipo más regular del torneo.
El Rival
“Chepo” de la Torre es un técnico con muchos defectos, pero mucha experiencia. Su Chivas, resquebrajado emocional, deportiva e institucionalmente ofrece una triste sensación de fatalidad. Le falta un mar de tranquilidad. Y tanto nerviosismo se nota en las maneras e hiperactividad de su entrenador.
Los rojiblancos salieron con cuatro defensas, cuatro mediocampistas y dos delanteros que fueron variando el dibujo de acuerdo a la situación del partido. Como muchos clubes europeos de elite, Guadalajara salió en tromba a presionar adelante del mediocampo, ser agresivo e intimidar a su rival. Un esfuerzo que debe ser cuidadoso para no convertirse en suicida.
Pero “Chepo” estudió bien a su rival y se esmeró en negarle cualquier pasillo central. Le pobló la zona de creación y acercó sus jugadores a los compadres esmeraldas para evitar sus asociaciones y giros. A la defensa esmeralda la mantuvo entretenida con sus dos delanteros coqueteando con la ruptura hacía la espalda, casi en fuera de lugar.
La idea de ataque se basó en aprovechar sus buenos pasadores desde defensa o centro del campo para contactar a sus delanteros a la espalda de la defensa o un hombre de banda para buscar la frontal del área. El plan fue cambiando con el partido, pero eso lo veremos con el análisis.
Club León
El equipo esmeralda repitió el 4-3-3 que estrenó contra Guadalajara el torneo pasado. Con la diferencia de Diego Novaretti por Burdisso, baja por expulsión contra Morelia (Pedimos disculpas, en la previa del partido mencionamos a Guillermo como titular) el equipo mantuvo su sistema de juego. Incluso se observó a Diego cumpliendo la función de Burdisso adelantándose unos metros a su compañero Nacho.
Ante el tapón que hizo Guadalajara en el carril central, la defensa tuvo que trabajar mucho en la salida de la pelota y encontró un medio: primero, hacer que la pelota circulara en zona baja en busca de claridad y después buscar directamente a Burbano o Elías. Especialmente receptivo estuvo Burbano, que encontró hueco en varias ocasiones y Elías colaboró bastante en acercarse para ayudar a tratar de que la pelota circulara en mediocampo.
El Partido
Guadalajara salió muy al frente, en una cuestión que puede interpretarse como declaración de intenciones y sacudirse el peso de su difícil situación. A pesar de que lograron dificultar el juego leonés y poner mucha intensidad en la presión, mostró su carencia principal: una falta de claridad alarmante en ¾. Así sería toda la noche.
El Club León, por su parte, una vez que detectó el cierre de pasillos centrales, los abandonó. Comenzó a buscar salir por la banda y destacó por la izquierda, con Burbano como electrón libre y apoyado por Velarde, atentó a la cobertura pero también a doblarlo o asociarse para generarle situaciones de 1×1 al colombiano.
La tendencia fue la misma hasta el minuto 20. Novaretti se adelantaba al mediocampo para robar, conducir u ofrecer apoyos interiores, Peña y Montes trataron de jugar pero estuvieron muy imprecisos y La Fiera retrocedió la pelota para aclarar situaciones.
Guadalajara había hecho desaparecer a Peña en ataque, pero comenzó la segunda parte del plan del “Chepo”: es imposible mantener un ritmo tan alto durante 90 minutos. Guadalajara se replegó y comenzó a defender detrás del centro del campo, en un 4-4-2 con Fierro y Bravo en el mismo plano. Los verdes agradecieron los metros y avanzaron, pero el riesgo estaba en los contragolpes tapatíos por las bandas, donde le duele a los esmeraldas. Ahí Nacho se erigió como gigante, saliendo oportunísimo a cortar las jugadas hasta la raya de cal.
Chivas volvió a cambiar. Fierro se fue a la derecha y Cisneros, el único que le daba sentido a lo que hacía Guadalajara con la pelota en los pies, estaba detrás de Omar Bravo. Con el 4-5-1 “Chepo” quería seguridad para recuperar y opciones de pase adelante.
En esos últimos diez minutos del primer tiempo, la historia pudo ser diferente. Burbano encontró posiciones para centrar y tenía rematadores en el área, pero a diferencia de otros partidos, no logró conectar un buen balón. Eso fue lo que hizo desaparecer a Boselli del partido, sin ocasiones, el goleador se contentó con pelear la pelota para ayudar a su equipo. De todos modos, Nacho González reclamó la noche para sí con un gol marca de la casa: Tiro de esquina al corazón del área y remate de cabeza.
Para la segunda mitad, Chivas abrió el campo separando sus líneas y buscando las bandas con pases largos. Se fiaron los tapatíos al “Chatón”, quién era recuperador y organizador al mismo tiempo. Decidieron mantenerse prudentes, vigilando a los leoneses y tratando de jugar rápido. Primero, León encontró un juego de ida y vuelta donde sorprendentemente no se sintió cómodo, no logró conjuntarse cuando llegaba al marco rival. Después se borró del campo. Cuando Vázquez levantaba la cabeza todos los receptores del equipo estaban tapados y estáticos. Hay una diferencia muy grande entre estar a la espalda de los contenciones y en estar tapados por ellos. Y la defensa de Chivas estuvo muy atenta a incomodar alguna recepción en esa zona.
Con el partido así parecía el momento de Rocha. Si el rebaño sólo lo vigilaba, podía encontrar a los extremos con balones largos. Pero apenas entró, “Chepo” quemó las naves y Guadalajara se arrojó al cuello del Club León, que se dedicó a esperar.
Conclusión
Igual que aquél San Lorenzo campeón, el equipo es el más regular. Ayer se dedicó a sobrellevar el encuentro y dejarlo estar. Un Guadalajara que nada tuvo que ver con lo que hizo Tigres tuvo la iniciativa en los últimos minutos. Se nota mucha confianza en el equipo y probablemente se dedique a resolver los partidos para seguir en la construcción de un paso firme que se convierta en marcha. Dicho de otra manera, nada ha escapado de los planes de Pizzi por ahora.
Además, ya sabemos de lo que es capaz el equipo cuando le obligan a batallar. Morelia y Veracruz son testigos. La sensación es que el Club León controla lo que debe pasar y no se esfuerza al máximo porque no es el momento.
En twitter, @Akelandos.
DIEGO NOVARETTI (BIO)
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9 de mayo de 1985
Altura 1,94
Pierna Derecha
Posiciones: Defensa Central, Mediocentro defensivo.
Campeón con Toluca.
Ha jugado en Italia.
Diego Novaretti es, ante todo, un jugador muy técnico. Es su cualidad diferencial para jugar como central, por encima incluso de su imponente estatura y a pesar de ella. Sus recepciones son limpias, con un control de la pelota que nunca se le escapa, y su golpeo de balón para el pase, ya sea raso o de botepronto, es preciso. Posee también una moderada visión que le permite encontrar al compañero en espacios reducidos, rápida y certeramente, incluso en situaciones de banda. Con la pelota en los pies es muy paciente, nunca se desespera. Su tranquilidad deriva en clase y sabe tirar pases cortos pero diagonales: ideales para avanzar en grupo y encontrar al tercer hombre.
Evidentemente, su estatura le hace bueno por alto, parte con una ventaja natural. Sin embargo, no basa sus remates de cabeza en área contrario en su potencia, sino en su colocación y técnica. Encuentra la colocación donde la pelota puede caer y luego utiliza su cabeza más para dar colocación que para dar fuerza al remate, característica que comparte con Boselli. Sus remates a gol se basan en anticipar o moverse en busca del balón.
Defendiendo, utiliza su zancada y relativa velocidad para acercarse al rival y sacarle la pelota aprovechando la longitud de su pierna derecha, que es con la que patea y con la que ataca la posesión del rival.
En suma, hablamos de un defensa que supone un salto de calidad técnica a lo que ha sido la zaga del León desde la salida de Márquez. No tiene el trazo largo del michoacano, pero puede habilitar salidas mediante la conducción o jugarla ante la presión rival. Tiene características de mediocentro defensivo, lo cual supone una solución diferente a la búsqueda del club de un central que pueda saltar al mediocampo sin desentonar, tanto para cortar, robar o asociarse. Será incluso interesante, si llegará a falta Vázquez, verlo como mediocentro asociándose con Montes.
Es un fichaje ilusionante.
